Un nuevo contendiente ha llegado al mundo de los videojuegos de simulación y está causando un gran revuelo: "Schedule I". Este título se presenta como un inmersivo simulador de crimen donde los jugadores se sumergen en el bajo mundo con el objetivo de construir un vasto imperio del narcotráfico.
Lejos de ser una experiencia puramente sombría, "Schedule I" parece haber encontrado una fórmula que combina la estrategia y gestión de un negocio ilícito con un tono inesperadamente ligero y toques de humor, distanciándose de simuladores más crudos. Los jugadores deben producir y distribuir drogas, expandir su red de operaciones, adquirir propiedades y enfrentarse a los desafíos que presentan tanto las fuerzas del orden como las bandas rivales.
Uno de los grandes atractivos del juego es su modo multijugador cooperativo, que permite a los amigos unirse para colaborar en la construcción de su emporio criminal, generando situaciones caóticas y divertidas. Su popularidad se disparó tras una exitosa demo y la exposición que recibió de grandes creadores de contenido en plataformas de streaming.